miércoles, 27 de septiembre de 2017

VIKTOR FRANKL: MODELO DE RESILIENCIA


  
Aproximarse a la historia de vida experimentada por Viktor Frankl durante el confinamiento en los campos de concentración de Theresienstadt, Auschwitz, Kaufering y Turkheim, dos campos de concentración que dependían del de Dachau, entre 1942 y 1945, no deja de producir un sentimiento sobrecogedor, dadas las crueles torturas, desmanes y atropellos a los que fue sometido él y el resto de los judíos confinados en los campos de la muerte. No obstante, a pesar de estas terribles circunstancias Frankl, “Metamorfoseó la realidad” Cyrulnik (2006) al punto de producir una propuesta de método psicoterapéutico llamado logoterapia, fundamentado en tres principios básicos: Libertad de voluntad, voluntad de sentido y sentido de vida,  el mismo ha sido reconocido mundialmente e identificado como la III Escuela Vienesa de Psicoterapia, después de la de Freud y Adler.

Frankl  enfoca su atención en el sentido de la existencia humana, así como en la búsqueda de dicho sentido por el individuo; para el propio autor “La búsqueda por parte del hombre del sentido de su vida constituye una fuerza primaria y no una <<racionalización secundaria>> de sus impulsos instintivos” (Frankl, 2004, p. 121). La vida ofrece circunstancias y oportunidades que pueden desenfocar el sentido, tal como le ocurrió a Frankl; sin embargo,  al hombre se le puede despojar de todo, hasta confrontarlo con la desnudez, salvo una sola cosa, la libertad de elección, ésta es “la última de las libertades humanas –la elección de la actitud personal que debe adoptar frente al destino- para decidir su propio camino” (Frankl, 2004, p. 90) y a ello apostó Frankl. 

De allí que surge la pregunta, ¿por qué vale la pena que viva un hombre que se encuentra subyugado a las duras e infrahumanas condiciones de un campo de concentración? La vida es una cuestión de elección y de decisión, desde la libertad interior puede decidir como enfrentar su experiencia de vida y ello se trata de una cuestión de actitud y así lo corrobora Frankl (2004) cuando  declara “…se advierte que cada prisionero se convertía en un determinado tipo de persona, y ese tipo personal era más el resultado de una decisión íntima que el producto de las férreas y tiránicas influencias recibidas en la vida del lager”(91).

Frankl concluyó apoyando lo expuesto por Friederich Nietzsche cuando dijo: “Aquellos que tienen un por qué para vivir, pese a la adversidad, resistirán”. Esto lo corroboró a partir de sus propias experiencias con los compañeros del campo de concentración, al ver quien sobrevivía y quien no, al percibir como las personas que guardaban la esperanza de reencontrar a sus seres queridos o que aún abrigaban algún proyecto o necesidad inconclusa y los que demostraban fe, aparentaban tener mejores oportunidades de sobrevivir con respecto a los que habían perdido la esperanza. La expresión más fehaciente de este comportamiento resiliente con respecto a los otros, lo demostró Viktor Frankl en sí mismo.

Ahora bien, ¿qué entendemos por resiliencia? Resiliencia es una palabra que abarca diferentes significados, sin embargo en este contexto se entiende como “resistencia al sufrimiento” o “capacidad de resistir las magulladuras de la herida psicológica como el impulso de reparación psíquica que nace de la resistencia” (Cyrulnik, 2001, pág. 23); por  tanto la resiliencia implica un proceso que terapéuticamente puede ser estimulado y desarrollado, que permite a la persona salir fortalecida y renovada con respecto a las experiencias adversas y traumas, (Griffa, 2003. p.1)  permitiendo que surjan las capacidades físicas, psíquicas, sociales y espirituales (noéticas) para alcanzar una vida con sentido.

De esta manera, la actitud resiliente adoptada por Frankl frente a la ignominia vivida en los campos de concentración, da cuenta del sentido que le dio a su propia vida mientras soportó las intolerables circunstancias, tal actitud se sostuvo en el accionar, por su propia persona, los principales pilares de la logoterapia: la libertad de la voluntad, enfocada en la “libertad interna, espiritual ante los condicionamientos biológicos, psicológicos y sociales” (García y Yánez, s/f. p.18). Frankl se interrogó acerca del ¿qué quiero? y fue capaz de elegir con libertad, dándole a su vida coherencia, definición clara de los objetivos y unidad; esta actitud altamente responsable le permitió sobrevivir a los campos de concentración.

Otro pilar fundamental y del cual dio cuenta Frankl es la voluntad de sentido, se trata de la fuerza primaria de motivación que caracteriza al hombre, sin esta fuerza el hombre es incapaz de actuar y aún menos de vivir, especialmente si confronta una situación dolorosa. (Lange, 2000). La ausencia de la voluntad de sentido crea el vacío existencial y este vacío se llena con poder, sexo, adicciones, “cosas” intrascendentes que a la larga dejan una mayor desolación que al final en muchos casos conducen a optar por el suicidio. Definitivamente Frankl eligió con voluntad de sentido y lo expresa a través de sus propias palabras cuando dice “Dejemos de interrogarnos sobre el sentido de la vida y, en cambio, pensemos en lo que la existencia nos reclama continua e incesantemente. Y respondamos… con el valor y la conducta recta y adecuada” (Frankl, 2004, p.101).
    
El tercer pilar de la logoterapia lo constituye el sentido de la vida, el cual se puede alcanzar a través de los siguientes valores: Valores existenciales, implican vivenciar algo o alguien que valoramos, de allí que abarquen una amplia gama, que contempla desde disfrutar una obra de arte o la propia naturaleza hasta su mayor expresión que se manifiesta en el valor que le otorgamos a otra persona a través del amor, induciendo a esa persona a encontrar y desarrollar su propio sentido y de esta manera alcanzar nuestro propio sentido.
   
Los valores creativos son otra forma de alcanzar el sentido, es a través de ellos como podemos “llevar a cabo un acto” y así lo expresa el mismo Frankl. Es la capacidad que tenemos de “sacar algo de la nada”, de accionar los propios proyectos con compromiso y responsabilidad, haciendo buen uso de la libertad.
    
A los valores experienciales y creativos se agregan los actitudinales, implican la postura que asumimos frente a la adversidad, la tragedia, el dolor, en fin frente a la vida, se trata de los valores que tienen un mayor nivel de valor ético y se expresan por medio de virtudes como la valentía, la compasión y el humor.

Frankl fue capaz de enfrentar con sentido y actitud resiliente el sufrimiento y desarrollar los valores descritos con su actuación de apoyo y ayuda que ejerció durante su estancia en los campos de concentración y nos dejó desde esta experiencia de horror una experiencia que nos ilumina hoy a muchos “el sentido de la vida”




Referencias bibliográficas

Cyrulnik, B. (2001). Los patitos feos, Una infancia infeliz no determina la vida. 5ta. Edición.
     Barcelona: Gedisa.

Frankl, V. (2004). El hombre en busca de sentido. Barcelona: Heder

García y Yánez, s/f. Logoterapia y análisis existencial [Documento en línea]. Disponible  en 

Griffa, M. C. (2003, enero)  Reflexiones  acerca  de  la  capacidad  del  yo  y la resiliencia.  
    [Documento  en   línea]  Ponencia  presentada  en  el Simposio  2003  en  la  Fundación
    Luís Chiozza. Buenos Aires. Disponible: www.usal.edu.ar/archivos/psico/otros/3.pdf
    [Consulta: 2016, agosto 3]

Lange, A. (2000). Viktor Frankl. Una biografía. 2da. Edición. Barcelona: Herder Editorial S.A. (orden alfabético)


Melillo  A. ( 2004) Resiliencia.  Revista  Psicoanálisis: ayer  y  hoy.  [Revista  en  línea] 1.

     Disponible: http://www.elpsicoanalisis.org.ar/  [Consulta: 2016, Agosto 3]

  

Melillo, A. y Suárez, E. (compiladores) (2001). Resilencia. Descubriendo las propias   fortalezas. Editorial Paidós, Buenos Aires.

MSc. Daisy Anzola
Diplomada en Logoterapia, Análisis Existencial y Sentido de Vida (II Cohorte).
Instituto Venezolano de Logoterapia y Análisis Viktor Frankl

2 comentarios:

  1. excelente paseo por el sentido a la vida y me sirve para mi planificacion de logoterapia a nivel educativo quisiera explorar mucho mas en vista de mi acompañamiento a mis docentes en su planificación

    ResponderBorrar
  2. Me gustó mucho este post porque es una síntesis muy acertada para explicar el surgimiento de esta psicoterapia a partir de las vivencias de Frankl en los campos de concentración y la resiliencia como comportamiento para enfrentar el desencuadre que puede producir la realidad. En estas momentos de crisis en Venezuela es una puerta que se abre para sobrellevarla con dignidad.

    ResponderBorrar

La logoterapia en mi cotidianidad

     La primera vez que escuché hablar de Logoterapia, fue en mi segundo año de residencia en el postgrado de psiquiatría, estudios ...